Los mejores lugares para ver Tigres en India
Situación
India
Accesos
Los parques nacionales suelen estar bastante distantes de las ciudades principales y las ciudades con aeropuerto, si bien son muchas las poblaciones que cuentan con vuelos desde Delhi y las principales ciudades indias. Normalmente habrá que conducir (con guía local) 2-6 horas desde el aeropuerto hasta el parque.
Ranthambore se encuentra a 5 horas de Agra. Los aeropuertos más cercanos son Jaipur (5 h.) y Delhi (6-7 h,).
Bandhavgarg se encuentra a 6 horas de Jabalpur.
Kanha se encuentra a 4 horas de Jabalpur.
Tadoba se encuentra a 1,5 h. de Nagpur.
Highlights
Además del Tigre de Bengala, entre la fauna más sobresaliente en estos parques nacionales indios destaca el leopardo, el oso bezudo, el bisonte indio, el dhole o perro salvaje indio, la hiena, el chital, el sambar, el muntjac, el nilgai, el cocodrilo y una larga lista de aves.
Cuando
En el centro de India los parques nacionales cierran en verano por el excesivo calor. En muchos casos solo se pueden visitar de octubre a junio. En el invierno (diciembre-febrero) los paisajes lucen esplendoroso pero la vegetación es frondosa y la mayor presencia de agua dificulta la observación de tigres al estar más dispersos. En Verano (marzo-mayo/junio) el calor va en aumento y las probabilidades suben si centramos la búsqueda en las zonas con agua. En Tadoba en mayo-junio el calor es muy alto.
Consejos
Permisos de Safari. En india es preciso sacar los permisos para safaris en los parques nacionales con al menos 2 meses de antelación. Es recomendable contratar el mayor número posible de safaris en zonas principales de cada parque (ha de solicitarse a las autoridades, que son quienes asignan día, mañana/tarde y sector para cada safari.
Para solventar con garantías todas las gestiones y solucionar también la logística de transportes, lo mejor es realizar las reservas con agencia especilizada. En nuestro caso Ecowildlife Travel.
Para la ropa no olvides prendas de abrigo, especialmente entre diciembre-febrero, con temperaturas bajo cero al amanecer.
Una máscara para el polvo puede resultar muy útil en época seca (marzo-junio). Lleva el equipo fotográfico muy bien protegido contra el polvo.
¿Tienes pensado ir a India en busca de tigres? ¿Sabes qué parques son mejores para ir a verlos? Te damos algunas pistas a la hora de elegir destino para observar a este gran felino en libertad.
Los datos oficiales del último censo realizado y publicados a comienzos de 2015 hablan de un incremento en la población de tigres en India del 30% en los últimos cuatro años hasta alcanzar una población actual de 2.226 tigres de Bengala. Se están ultimando los datos del nuevo censo pero entretanto, marca un cambio en la tendencia negativa que planeaba sobre la especie. Yo mismo lo he notado después de varios años en el campo, cuando antes resultaba muy complejo observar un tigre en libertad y, en los últimos safaris realizados, el éxito de avistamiento había ganado muchos enteros. Sin poder llegar a garantizarse nunca, digamos que en estos momentos resulta difícil regresar de un viaje a India para ver tigre y regresar de vacío. El lugar que se visite, eso si, tiene mucho que ver en ese porcentaje de éxito.
Así pues el contrapunto positivo a elefantes africanos o rinocerontes lo encontramos a día de hoy en el continente asiático, en lo que al tigre de Bengala y la recuperación de la especie se refiere. No están las cosas para tirar cohetes, pero siempre es mejor hablar de aumentos cuando de la vida de especies tan amenazadas y escasas se trata. En el caso del tigre las cifras son bien diferentes. El censo que realiza cada tres años la Autoridad Nacional de Conservación del Tigre (NTCA) en India permite coger aire a la especie, que ha pasado de los 1.411 tigres en 2008, a los 1.706 individuos en 2011 y los 2.226 tigres en 2014. Nada menos que un aumento del 30% entre 2011 y 2014. Los esfuerzos realizados por el Gobierno y las estrictas medidas de gestión llevadas a cabo están dando sus frutos. Además, es la primera vez que se ha podido fotografiar al 80% de la población de tigres (1.540 individuos). El resto de datos se han obtenido mediante cámaras en zonas solitarias y estimaciones estadísticas (a través de extrapolaciones, etc.). La parte negativa hace referencia a que no existen apenas tigres fuera de los bosques de estas zonas protegidas, fruto sin duda de la presión humana.
Por estados, Karnataka con 408 tigres es el estado que presenta la mayor población del felino, seguido de Uttarakhand (340), Madyha Pradesh (309), Tamil Nadu (229, Maharashtra (190), Assam (167), Kerala (136), y Uttar Pradesh (117). La cifra hace referencia a los tigres de 1,5 años de edad, pues durante el primer año de vida presenta una tasa de mortalidad alta que no haría fiables los datos.
De esta forma, la mayor cantidad de tigres en India estaría en el sur del país. Primera pista. La región Western Ghats, con 776 individuos entre los estados de Kamataka, TN, Kerala y Goa. Esta región del país ha mostrado un incremento del 45%, pasando de los 402 tigres de 2006 a 534 (2010) y 776 (2014). La India central y Eastern Ghats (estados de AP, C’garth, Madyha Pradesh, Maharashtra, Odisha, Rajasthan y Jharkland), donde tradicionalmente más animales había, muestra un moderando ascenso del 14% después de haberse mantenido estable durante los últimos ocho años (601 en 2006 y 2010, y 688 en 2014). Las Colinas del NE y las planicies de Brahmaputra, con los estados de Assam, Arunchal, Mizoram, WB norte, NE Hills y Brahmaputra, ha crecido un 36% pasando de 100 tigres en 2006 a 148 en 2010 y 201 en 2014. La vecina parte de Shivalik-Gangetic Plain (Uttarakhland, UP y Bihar) contaba en 2006 con 297 tigres, que pasaron a ser 353 en 2010 y 485 en 2014, lo que significa un aumento del 37% en su población del gran felino asiático. Por último, los Sundarbans tienen 6 tigres más ahora que en 2010 (aumento 9%) pasando de 70 a 76 individuos.
Pero la segunda pista tiene que ver con la densidad de estos felinos dentro de un mismo parque/reserva. Sin duda la principal baza a la hora de decantarse por uno u otro.
Safaris fotográficos en busca del Tigre ¿En qué consisten?
Los safaris fotográficos para ver tigres son diferentes a los safaris africanos, más populares y seguramente mejor conocidos por los lectores. Los safaris en India son distintos, son casi safaris románticos, al viejo estilo de los safaris de antaño. Se trata de safaris de rastreo, como antiguamente hacían los maharajás y su séquito de caza en sus elefantes, que iban siguiendo el rastro del tigre hasta dar con él. Afortunadamente la motivación actual es muy diferente y nada tiene que ver con los fines cinegéticos y de ostentación de los antiguos monarcas, pero en cierto modo conserva ese encanto de rastreo cambiando los elefantes por los vehículos 4×4. Por cierto que en los parques indios como Kanha o Bandhavgarh, desde finales de 2013 ya no se permiten los safaris en elefante. Los elefantes indios sólo se emplean para labores de vigilancia y estudio de los tigres.
A diferencia de África, sin radios a bordo, los guías se avisan unos a otros con mensajes en los teléfonos móviles cuando el felino está muy cerca, pero para llegar a detectar algo interesante, la labor conjunta de los coches de safari se torna fundamental. Ahí es cuando entra en juego el rastreo.
Los vehículos funcionan como los nudos de una tela de araña. A primera hora del día la misión de conductores y guías es localizar las huellas frescas de un tigre (en India es obligatorio llevar un guía oficial del parque nacional en cada coche, además de un guía local naturalista, que puede ir o no). Una vez localizadas las huellas, se sigue el rastro desde el vehículo (los conductores no pueden pisar huellas frescas) hasta el punto donde éstas se pierden internándose en la selva o sobre sustratos que no son la arena de los caminos (roca, vegetación, etc.). Los tigres gustan de caminar por las pistas de tierra, donde pueden avanzar sin vegetación y con firme más cómodo.
Llegados al punto donde las huellas se pierden, los vehículos siguen la dirección del rastro por la pista (no está permitido salirse de los caminos) y se van deteniendo separados por unos centenares de metros para tejer la tela de araña de escuchas. Una vez localizado el tigre pero perdido el rastro, sólo resta escuchar a la selva, estudiar el comportamiento de los animales ante la posible presencia de un depredador. Se detienen los motores de los coches y los guías fijan su atención en el sonido de la selva a la espera de la esperada señal. Alarm call!!, alarm call!! (llamada de alarma) es la frase más deseada en esos momentos. Pájaros, monos langures y ciervos se encargan de avisar sobre la presencia del tigre. Las aves alborotadas y nerviosas, comienzan a trinar de forma diferente. Los langures, desde su privilegiada posición aérea en la parte alta de los árboles, detectan cualquier movimiento y los ciervos, una vez olido el felino, lanzan bramidos característicos a modo de gritos de aviso para sus congéneres. Todos forman la banda sonora de la llamada de alarma. El sonido se va desplazando por el dosel forestal en el sentido que avanza el tigre y los vehículos sólo tienen que situarse en el lugar apropiado y esperar a que el mayor y más majestuoso de los felinos se deje ver entre las ramas o salga a terreno despejado. Los visitantes, con sus cámaras de fotos preparadas aguardan excitados el gran encuentro que puede ser muy fugaz (apenas unos pocos segundos) o, en el mejor de los casos, durar unos pocos minutos.
La siguiente imagen 360º muestra la espera ante un tigre localizado en la espesura.
¿Cuáles son los mejores parques para ver tigres?
Este ritual de rastreo se repite en los safaris de mañana (siempre hay más posibilidades de ver tigres y leopardos a primera hora de la mañana) y en los safaris de tarde. A partir de ahí entra en juego la suerte de estar en el lugar adecuado y en el momento preciso. Nunca se puede garantizar la observación de fauna en libertad (y menos en el caso de tigres o leopardos, animales esquivos, nocturnos y generalmente solitarios; maestros del camuflaje) pero para que al menos el lugar sea el adecuado, a continuación te muestro una selección sobre los que considero son los mejores parques nacionales (reservas del Proyecto Tigre) para observar tigres en su hábitat natural:
Parque nacional Bandhavgarh (estado Madhya Pradesh): Tiene una población de alrededor de 50-55 tigres. Es un parque relativamente pequeño, con lo que la probabilidad de observación aumenta. Presenta la mayor densidad de tigres de Bengala en el mundo, de forma que en estos últimos años, se ha convertido en el mejor parque para observarlos.
Parque nacional Kanha (Madhya Pradesh): mucho mayor en extensión que Bandhavgarh alberga una población de 95 tigres. Buenas probabilidades de observación, que aumentan en el verano indio (antes del monzón), cuando la vegetación no es tan frondosa.
Parque nacional Tadoba (Maharashtra): Es un parque pequeño y entre marzo-mayo, cuando el calor es más fuerte antes de la llegada de los monzones, los felinos se concentran en torno a los puntos de agua. Como en el parque sólo hay tres zonas con agua, las probabilidades aumentan en esta época.
Parque nacional Ranthambore (Rajasthan): Fue buque insignia de los parques nacionales indios en lo que a tigres se refiere pero pasó unos años atrás por una situación crítica en cuanto a la población de felinos. Afortunadamente parece que las medidas de protección están dando sus frutos y el parque vuelve por sus fueros a ser lo que era.
Existen otros parques como Panna, Pench, Satpura o Corbett en los que también es “frecuente” poder observar tigre pero sin duda los cuatro indicados son, a mi juicio, los predilectos.
Safari de Tigres en India from El Ecoturista on Vimeo.
Video grabado durante los safaris fotográficos realizados con Ecowildlife Travel.
Tercera pista. Dentro de un parque nacional hay diferentes sectores para la realización del safari. Si hay disponibilidad, se puede elegir si realizar la visita en zona corazón (que suele incluir varios sectores) o en los sectores secundarios (respecto a la densidad de tigres). No es lo mismo realizar un safari en la zona corazón que en la denominada zona periférica. Y el precio de entrada a según qué zona dentro del parque tampoco lo es. La diferencia de precio es importante, pero puede marcar la diferencia entre volverse de vacío o no. ¿Qué os recomiendo? Combinar varios parques (2-3) en un mismo viaje y realizar al menos un par de safaris en zona corazón en cada uno de ellos. En los sectores periféricos también es posible ver tigre, además de otras especies (leopardo, oso bezudo, etc.) y, a buen seguro, paisajes impresionantes.
En algunos parques nacionales indios pueden exigir el pago de una tasa de fotografía aparte. Son unos 12 euros/entrada que han de abonarse cada vez que se accede al interior del parque y el criterio de pago por parte de las autoridades tiene que ver con los megapixles de la cámara (no para teléfonos móviles). Si tiene más de 7 megapíxels se ha de abonar. Es decir, que a buen seguro que te harán pagar. ¿La buena noticia? de momento no es preciso en los principales parques que os recomiendo en este reportaje.