Isla Navarino, nuevo destino natural en Tierra de Fuego
El eslogan de esta pequeña isla chilena: paraíso natural del fin del mundo, lo dice todo. Englobada dentro de la Reserva de la Biosfera del Cabo de Hornos, se ha presentado hoy en Pangea The Travel Store, en Madrid, como nuevo destino de naturaleza.
ISLA NAVARINO, AL SUR DEL SUR
Delimitada al norte por el Canal de Beagle, la línea divisoria que separa la parte más austral de Argentina de la de Chile, Isla Navarino emerge como parte del archipiélago de Tierra de Fuego, en el extremo meridional de América del Sur. Administrativamente pertenece a la República de Chile y dentro de ésta, se encuentra en la Región de Magallanes y Antártica Chilena, Comuna Cabo de Hornos.
Su ribera más septentrional es testigo del encuentro entre los océanos Atlántico y Pacífico. Su nombre, el Canal de Beagle, hace referencia al barco comandado por el almirante Fitz Roy, que llevó a un jovencísimo recién egresado Charles Darwin hasta este lugar que le marcó para siempre, y motivó a desarrollar su famosa teoría de la evolución. Al otro lado de este canal, por el norte, se encuentra la Isla Grande de Tierra del Fuego. Al sur, cruzando la Bahía Nassau, los últimos tramos terrestres del continente los delimita el archipiélago de las Islas Wollaston y el célebre Cabo de Hornos, uno de los pasos interoceánicos más australes del planeta.
Su actual mayor particularidad reside en albergar la población más al sur del planeta, Puerto Williams, capital administrativa de la Provincia Antártica Chilena y la Comuna de Cabo de Hornos. Un lugar rodeado por la naturaleza más indómita y hermosa, que recientemente logró arrebatar este título a la ciudad argentina de Ushuaia, capital de Tierra de Fuego, situada al norte del Canal de Beagle y a tan solo unos 7 kilómetros de distancia.
Hoy, casi intacta, Isla Navarino es un destino emergente que carece de grandes aglomeraciones o turismo masivo, lo que convierte a este enclave en un lugar muy especial y único para aquellos que busquen empaparse de una increíble naturaleza virgen, una fascinante cultura ancestral y los pasos de la historia.
La fuerza del mar, el poder del viento patagónico, los paisajes formados por enormes montañas que parecen surgir de las aguas, los bosques nativos de la Reserva de la Biosfera Cabo de Hornos, son algunos de los elementos que hacen de este destino un auténtico paraíso natural. Salvaje y virgen, este territorio está considerado una de las 24 ecorregiones más prístinas del mundo.
Tierra de récords, este balcón que mira hacia dos aguas y al país vecino acumula en su haber la ruta de trekking más austral del planeta. Se trata de un singular recorrido por los Dientes de Navarino que llevará al senderista a caminar por caminos casi inexistentes, pernoctar en lugares sin ningún atisbo de civilización, avistar incluso el Cabo de Hornos desde algunos de sus filos. Además, Isla Navarino ofrece infinitas posibilidades para los amantes del deporte, desde kayak, mountain bike, tirolesa, rutas a caballo, lo que la consolida como un referente para el turismo de aventura a nivel internacional.
Testigo y encrucijada entre los océanos Pacífico y Atlántico, su tradición gastronómica está muy centrada en los frutos del mar, siendo la centolla y el centollón los protagonistas de algunos de los platos más populares de la isla. El castor, especie exótica introducida que hoy vive en la isla a sus anchas al carecer de depredadores, también se está haciendo un hueco entre los platos típicos de la isla.
UNA ISLA DOMINADA POR LA NATURALEZA
En la Patagonia chilena, en un lugar marcado por profundos estrechos y extensas bahías que en su día Darwin definió como “un país montañoso, en parte sumergido”, Isla Navarino se sitúa sobre la que actualmente está considerada como una de las 24 ecorregiones más prístinas del planeta por su carácter remoto, virgen y singular.
Situada próxima al mítico Cabo de Hornos, forma parte del territorio reconocido por la UNESCO como Reserva de la Biosfera por sus particularidades naturales. De los impresionantes glaciares en el brazo noroeste del Canal de Beagle hasta los densos bosques que a menudo parecen envolver todo a su alrededor entre la niebla que emerge por las mañanas, la diversidad de su fauna y flora queda patente a todo aquel que visita este rincón del fi n del mundo.
RESERVA DE LA BIOSFERA CABO DE HORNOS
Por sus condiciones extremas, el Cabo de Hornos y su archipiélago, constituyen una referencia geográfica única e inigualable. Este territorio ocupa el punto forestado más austral del planeta, libre del impacto humano y, desde 2005, es también la octava Reserva de la Biosfera de Chile según la UNESCO.
Con una extensión de 4.884.274 hectáreas, entre sus particularidades destaca la integración, por primera vez, de ecosistemas tanto terrestres como marinos; la incorporación de terrenos ubicados fuera del Sistema de Áreas Protegidas del Estado; el tamaño de su superficie, que triplica el área preexistente de Reservas de la Biosfera del país; y el hecho de tratarse de la mayor extensión del cono sur de Sudamérica.
La región de Magallanes y de la Antártica Chilena contiene, además, la mayor diversidad de especies de flora no-vascular de Chile, por lo que es un punto clave a nivel mundial para el desarrollo de briófitas. Más de 1.500 especies de musgos, líquenes y hepáticas dan lugar a un característico paisaje que recibe el nombre de ‘bosques en miniatura del Cabo de Hornos’. También sobresalen los bosques submarinos, donde los kelps o cordones de algas pardas como el huiro (Macrocystis pyrifera), el cochayuyo (Durvillaea antartica) y diversas especies del género Lessonia son los grandes protagonistas de un paisaje subacuático inédito.
CANALES Y GLACIARES
La llegada a la isla por el norte implica cruzar el Canal de Beagle, el estrecho que separa las partes más australes de los territorios argentino y chileno. Bautizado así en nombre del barco comandado por el almirante Fitz Roy y que en su segundo viaje llevó al naturalista Charles Darwin a este rincón del mundo. Pero esta historia apenas tiene 200 años de antigüedad…
Toda esta zona que hoy forma parte de los Parques Nacionales Cabo de Hornos y Alberto de Agostini podría considerarse aún a fecha de hoy inexploradas. Sin embargo, nombres como Onashaga (Canal de los Onas – Canal Beagle) o Ushuaia (bahía de la zarzaparrilla – Bahía de Puerto Williams) nos da pistas de quienes realmente conocieron y conocen estos lugares: los yaganes, nómades canoeros, remaban por sus aguas desde tiempos ancestrales sin entender de fronteras, llegando incluso a la isla Hornos.
En el brazo noroeste de esta línea divisoria imaginaria se encuentra la llamada Avenida de los Glaciares. Considerado por muchos como el tramo más impresionante del canal, se encuentra rodeado por una serie de ejemplares de este hermoso fenómeno natural que se desprenden hacia el mar desde el gigante campo de hielo: la cordillera Darwin. Glaciares Holanda, Italia, Alemania y Francia son algunos de los nombres de los más conocidos, bautizados en honor a los exploradores del siglo XIX, quienes trazaron los primeros mapas de la región. Actualmente, la mejor forma de llegar a este recóndito rincón de excelsa belleza es a través de los cruceros que ofrecen recorridos por estos glaciares, en el ferry que semanalmente parte de Punta Arenas con destino Puerto Williams (imperdibles 30 horas de navegación) o sobrevolarlo en avioneta también como vía de entrada a la Isla Navarino desde Punta Arenas, experiencia sensorial única que emociona y cautiva a la vez que hace posible ver el fin del mundo desde otra perspectiva.
Para reservas del destino: PANGEA The Travel Store
contacto@pangea.es – Tel. 910 837 976
Direcciones de interés: Explora Isla Navarino. www.exploraislanavarino.com