Parque natural Urkiola
El parque natural Urkiola (Bizkaia-Álava) es un territorio abrupto, caracterizado por las murallas de roca caliza que marcan su paisaje y que posibilitan las condiciones ambientales que definen la importancia de este parque vasco como divisoria de la cuenca cantábrica y mediterránea. El gran ecotono vasco.
El parque natural Urkiola (Bizkaia-Álava), declarado el 29 diciembre de 1989, se extiende a lo largo de 5.995 ha. repartidas en siete municipios de las comarcas vizcaínas de Arratia, el Duranguesado y el valle alavés de Aramaio. En términos topográficos estaría formado por la sierra de Aramotz, los montes del Duranguesado y la sierra de Arangio. Su máxima altura la constituyen los 1.331 metros del Anboto, una de las cimas más emblemáticas de Euskadi.
De la fusión de dos regiones biogeográficas resulta el soberbio paisaje vegetal de Urkiola. Sus moles graníticas sirven de frontera natural entre dos reinos, el Euroasiático, propio de la Europa atlántica, y el Mediterráneo, correspondiente a la mayor parte de la península Ibérica. Aquí se dan la mano buena parte de los mejores catálogos botánicos de ambas biorregiones gracias a las murallas de roca que se levantan en esta zona de la Cordillera para servir de muro de contención a las condiciones ambientales que definen ambos ambientes florales. Urkiola es, sobre todo, una zona de transición o ecotono. El gran ecotono vasco.
Santuario de Urkiola y mirador de las Tres Cruces
Si estás soltero/a, el santuario de Urkiola es tu particular Meca, el destino de tu peregrinación. Concretamente la piedra situada frente al santuario, pues cuenta la tradición que, con tan solo dar tres vueltas al monolito, encuentras pareja en un breve espacio de tiempo. También frente a la fachada principal del santuario, parte la corta senda (Viacrucis – Ermita de Cristo) que en escasos 5 minutos sitúa al visitante frente a uno de los miradores más sugerentes de Euskadi (y del norte peninsular). El mirador de Las Tres Cruces es probablemente el mejor lugar para una primera visión de Urkiola. Sus Tres Cruces son una tribuna para observar la fuerza de estos colosos pétreos que son las paredes calizas del Amboto, Untzillatx, Eskuagatx…
Desde aquí se intuyen los valles escondidos tras las montañas, los barrancos que de ellas se descuelgan. Estas zonas, más benignas climatológicamente hablando, son el lugar para encontrar especies más termófilas. Aunque el mirador de las Tres Cruces otorga una visión hacia el norte, es en la vertiente meridional donde proliferan las especies más mediterráneas.
Las comunidades vegetales de Urkiola
Además de las grisáceas paredes calizas que tienes frente a tus ojos desde el mirador, la vegetación es el elemento más importante y diferenciador del parque. Se trata de un extenso manto vegetal en el que se han identificado alrededor de 700 especies de flora y que está formado por bosques autóctonos, repoblaciones forestales, pastizales y comunidades de roquedo. Los bosques ocupan el 54% de la superficie del parque y más de la mitad de ese porcentaje (1.680 ha) son bosques autóctonos de hayas, robles, encinas, abedules y melojos (marojos). Hayas, robles y abedules dominan en la vertiente septentrional, donde las condiciones de humedad y umbría son mayores, y dejan el protagonismo a encinas y robles melojos en las orientaciones sur, especies más amantes del sol. A estas respectivas formaciones boscosas acompañan otras especies como acebo, mostajo o serbal de cazadores en las zonas más frescas, y madroños, aladiernos o ruscos en la vertiente meridional.
Los hayedos ocupan casi el 20% del territorio de Urkiola, siendo la principal formación boscosa del parque natural. Encontramos los dos tipos de hayedos, los que crecen sobre suelos calizos y los que lo hacen sobre suelo silíceo.
En los abundantes bosques de repoblación (23% del parque) crecen los pinos (laricio, de Monterrey y albar), alerces y cipreses. Pero no son las únicas especies que indican la presencia humana en la zona. Existen también magníficas muestras de hayedos trasmochos (plantados para la obtención de madera y carbón) como los de Saibi y Urkiolagirre (este último muy cerca del puerto de Urkiola). En estos bosques encontrarás hayas centenarias, aunque en la mayoría de los casos se trata de hayedos jóvenes. Además de los dos citados, los hayedos más extensos se localizan en el macizo de Eskuagatx y en la sierra de Arangio.
Pero si diversidad se trata, los bosques mixtos son los que mayor cantidad de especies aportan al parque (aunque se extienden apenas por al 1% de su superficie). Generalmente representados por el roble pedunculado (carballo), muchas veces aparece acompañado de arce menor, tilo de hoja grande, fresno, castaño, abedul, arraclán y avellano. En los robledales de la vertiente sur aparecen también el roble albar y el marojo.
Aunque crece en diferentes zonas del parque (siempre por debajo de los 600 metros de altitud, por debajo del hayedo) la mejor representación de bosque mixto probablemente sea la de Gatzaieta.
En las laderas y zonas más cálidas la reina es la encina. Los encinares tapizan el 6% del suelo de Urkiola y crece fundamentalmente en zonas de suelo calizo, donde la sequedad es mayor debido a que este tipo de suelo no retiene el agua. Los Montes del Duranguesado son su morada principal, entre los 300-800 metros de altura. Falta de agua es sinónimo de hoja perenne, y aquí encontramos también madroños, laurel, aladierno, labiérnago negro, rubia silvestre, zarzaparrilla, rusco, etc.
En el apartado faunístico mencionar que en el parque natural de Urkiola viven 137 especies de vertebrados (4 de peces, 7 de anfibios, 10 de reptiles, 74 de aves y 42 de mamíferos). Y en esta lista de ¿mamíferos? no contamos a Mari, la diosa principal de la mitología vasca. El Anboto es una de sus moradas principales, uno de los puntos por lo que esta diosa precristiana salía a la superficie a través de cuevas y simas (cueva de Mari).
Pastos montanos
Urkiola, referente del montañismo vasco, es un paisaje humanizado. Entre sus máximos exponentes se encuentran los pastos montanos que cuando son abandonados se convierten en zonas de matorral, cuna de especies invasoras e imán para los incendios. Para combatir estos problemas de conservación de los pastos montanos (uno de los ambientes más amenazados de Europa), se ha desarrollado hasta noviembre de 2021 en la zona (y en otros lugares Red Natura 2000) el proyecto LIFE Oreka Mendian. El eje del proyecto es el mantenimiento del uso tradicional como base para el equilibrio entre la conservación y el aprovechamiento socioeconómico de los pastos.
Cerca del santuario, en el puerto de Urkiola, encontrarás el centro de visitantes (Toki Alai) del parque natural. Una visita siempre recomendable para aprender y sacar el mejor provecho de tu paso por el espectacular parque natural de Urkiola, el ecotono vasco.