Reserva de la Biosfera Río Eo, Oscos y Terras de Burón
Pocos ríos en tan corto recorrido desde el nacimiento hasta la desembocadura, ofrecen tantos alicientes como el Eo. En sus apenas 92 kilómetros de curso, transita en su mayor parte por territorio gallego pero le da tiempo a hacerlo también por la vecina Asturias, con quien comparte desembocadura. ¡Cuánta belleza por metro cuadrado!
El recién nacido río Eo en A Cortevella.
En el 50 aniversario del programa Hombre y Biosfera (MaB de la UNESCO), acompañamos al Eo desde su nacimiento aguas abajo deteniéndonos casi a cada paso, pues las invitaciones a descubrir sus atractivos son una constante: el bosque de La Marronda (Fraga A Marronda), la vía verde del Eo, el paraje Natural A Choza o su desembocadura en la Ría de Ribadeo. Inmejorable forma de conocer su curso alto, medio y bajo respectivamente.
Arquitectura tradicional en O Real de Martín.
Este espacio natural pasó a integrarse en la Red Mundial de Reservas de la Biosfera (creada en 1971) el 19 de junio de 2007, cuando se declaró como tal. Comprende 158.883 ha de las cuales 108.007 ha están en Galicia y 50.876 ha. en Asturias. Dada su importancia está incluida también en la Red Natura 2000 y en su parte gallega aporta a esta red europea la ZEC Río Eo y la ZEPA Ribadeo.
La Reserva cuenta además en el tramo costero con un litoral absolutamente excepcional. Basta con asomarse al acantilado para comprobar cómo la madre natura ha querido ser especialmente generosa con la geología local. Aquí se encuentra la célebre Playa de las Catedrales, máximo exponente de la arquitectura natural. Descender el acantilado con la bajamar y tener una perspectiva desde la arena es entrar a la Capilla Sixtina de las playas. Podemos decir alto y claro que una de las playas (y tramos de costa) más espectaculares del mundo están en el norte de Lugo, en Ribadeo, dentro de la reserva de la biosfera del río Eo, Oscos y Terras do Burón, un espacio de la red gallega de reservas de la biosfera que cuenta con 41 tipos de hábitats de interés comunitario (11 prioritarios).
Monumento natural Playa de las Catedrales.
Nutria. Ilustración: José Arcas.
La fauna acuática del Eo es de sobresaliente importancia, abanderada por especies como el desmán ibérico, el salmón, la lamprea, el cangrejo de río, el mejillón de río y la nutria. Casi nada. Entre las singularidades de esta Reserva destaca el salmón, la tortuga careta, la presencia de plantas del Terciario (Woodwardia radicans o Vandenboschia speciosa) o las hayas más occidentales del continente europeo.
¿Qué ver en la de la reserva de la biosfera del Río Eo, Oscos y Terras do Burón?
Mucho, como ya hemos avanzado, pero a continuación os recomendamos los puntos imprescindibles (Highlights) desde el punto de vista de su naturaleza.
A diferencia de otros ríos no nace en la alta montaña sino entre praderas, a pie de carretera. Nada más aflorar en la pequeña localidad de Fonteo, el río pone rumbo al mar Cantábrico queriendo demostrar que, en su corto trazado, concentra alicientes para rato. El primero: el propio nacimiento.
Nacimiento del Eo
El río Eo nace en Fonteo (Baleira). El lugar se encuentra perfectamente acondicionado y junto a él se localiza el Centro de Interpretación do Río Eo y bosque da Marronda, además de un horno tradicional rehabilitado y una aldea que te espera para que la camines sin prisa.
Nacimiento del Eo en Fonteo.
Fraga da Marronda
El bosque que ves desde el nacimiento al otro lado de la carretera es A Marronda. Es uno de los bosques atlánticos mejor conservados de Galicia y presenta la particularidad de que en su interior crecen las hayas más occidentales de Europa. Esta delicia forestal se puede recorrer a pie a través del sendero circular PR-G 145 (Ruta da Marronda-Alto Eo; 21 km. 7 h. 30 min) y además de la foresta, el protagonista no es otro que el recién nacido río Eo. Esta ruta senderista puede comenzarse en San Paio o en A Cortevella. En este último enclave existe un área recreativa a orillas del río donde es posible ver elementos etnográficos como el muiño do ferreiro (ruinas), un hórreo, un par de ouriceiras y, muy cerca, la capela de Lourdes. No dejes de pasear por la aldea, hoy abandonada, de O Real de Martín. Refleja la dura realidad de la España rural pero es una delicia.
Fraga da Marronda. En este bosque atlántico crecen las hayas más occidentales de Europa.
Entre la flora de La Marronda: haya, roble, castaño, acebo, avellano, espino, aliso, fresno, abedul, etc. y entre sus habitantes: lobo, jabalí, zorro, corzo, ardilla, gineta, tejón y un sinfín de aves y pequeños pájaros.
Este bosque es el buque insignia de la Reserva pero existen otras formaciones boscosas de sumo interés como son el bosque de Carballido, la Fraga da Belosiña (Trabada). A Cortevella, por su parte, es una de las áreas recreativas, pero hay una veintena; hasta el punto de que forman una interesante ruta de áreas recreativas.
Muiño do Ferreiro.
Vía Verde del Eo
Esta vía verde recuperó los 12 kilómetros de trazado del ferrocarril de la antigua explotación minera entre Vilaoudriz (junto a A Pontenova) y San Tirso de Abres. Por las vías donde sacaban el hierro hasta el mar, hoy quedan puentes colgantes y varios túneles en un exuberante bosque fluvial.
Este ferrocarril minero de vía estrecha circulaba 33 kilómetros hasta Ribadeo y se puede ver algún resto del trazado entre O Cargadoiro (junto a la fortaleza de San Damián) y las inmediaciones de isla Pancha. Estuvo en funcionamiento entre 1903 y 1964.
A lo largo de los 12 km de la vía verde se suceden los túneles y puentes colgantes.
Curso medio del Eo en la vía verde.
Paraxe Natural A Choza
Aguas abajo llegamos a este paraje natural en Coruxa muy representativo del tramo medio del río Eo. Un área muy bien acondicionada permite observar flora y fauna autóctona y ofrece información sobre otras especies de la Zona Especial Conservación (ZEC Río Eo). Destacan en este rincón del bosque húmedo, por donde el Eo fluye ya ancho y con buen caudal, los árboles alisos y fresnos (tienen especial importancia en esta unidad ambiental), pero también son importantes la vegetación de orillas y prados circundantes que forman otras unidades ambientales importantes en la ZEC. Destacan el cárex, el junco marino, carrizo, salicor, acelga salada, cominillo, etc.
El salmón es el rey del río, donde nadan también la lamprea y la nutria. Entre los anfibios sobresalen el sapillo pintojo ibérico y el tritón ibérico. Entre las aves la cerceta común, el zarapito real y el escribano palustre.
Paraje natural A Choza.
Estuario del Eo.
Ría de Ribadeo
Esta ría es importante por las concentraciones de anátidas en invierno (ánade real, ánade silbón, ánade rabudo, etc.) a las que acompañan diferentes especies de ardeidas y láridos y las espátulas. Colimbo grande, zarapito real, correlimos común son otras aves que llaman la atención del observador que se acerca a esta Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA).
Entre los equipamientos destaca el Aula da Natureza Casa da Ría (Monte de Santa Cruz, en Ribadeo), el observatorio ornitológico colgado sobre la ría y otros puntos de interés asociados al Camino Natural que recorre esta orilla del estuario. El Camino Natural de la Ruta del Cantábrico comienza en el puerto de Ribadeo y termina, muchos kilómetros después, en Ortigueira, pero desde Ribadeo presenta un ramal que se adentra en la orilla gallega del estuario pasando por la Casa das Algas hasta el muiño das Aceas.
Observatorio ornitológico de la Ría del Eo en Ribadeo.
Llegados a esta parte del curso del río, es preciso mencionar que 496 ha de la Reserva son aguas marinas someras. Y afectan sobre todo al estuario del Eo en ambas orillas. El faro de isla Pancha domina desde su estratégico emplazamiento la bocana gallega del estuario del Eo. Desde esta isla rocosa hacia el oriente, se abre un litoral fascinante que te animo fervientemente a recorrer siguiendo la Ruta das Praias.
Isla Pancha.
Ruta das Praias
La Ruta de las Playas de Ribadeo es un recorrido turístico que enlaza las playas del concello: el arranque en la parte oriental de Rinlo está dominado por la roca (a excepción de la pequeña playa de Areosa), pero desde Punta Corveira hasta Las Catedrales, puedes disfrutar de la Playa de los Castros, la playa de las islas, la playa de Esteiro, la playa de las Catedrales y la playa de Barreiros. Arena y acantilados que son magia pura. La primera etapa del Camino Natural de la Ruta del Cantábrico une Ribadeo con la Playa de las Catedrales, así que nada mejor que utilizar este sendero señalizado para recorrer 21 km imposibles de olvidar. Recuerda que la playa de las Catedrales es Monumento Natural y en determinadas épocas del año es preciso reservar para poder acceder.
Ruta de las Playas. Fotografiando la Playa de las Islas. desde la Playa de los Castros.
Además de la belleza escénica de la ruta, en este tramo litoral se encuentran hábitats que se cuentan entre los de mayor importancia de la Reserva: los ecosistemas dunares y matorrales costeros.
Cetárea en Rinlo.
Negueira de Muñiz.
Terras de Burón
En el extremo sureste de la Reserva, no puedes perderte las imponentes panorámicas desde diferentes miradores existentes en Negueira de Muñiz y que tienen como protagonista en la mayoría de los casos al río Navia, que viene de la lindante comarca asturiana de Ibias. Ni dejar de relajarte perdiendo la vista en el horizonte de las onduladas montañas de A Fonsagrada, territorio que el oso pardo está recuperando. El úrsido sabe que esta es su morada, el lugar donde quiere estar, y quizá tú, después de la visita de esta reserva de la biosfera gallega, también te lo plantees…
