Bosque del río Arnoia en Allariz
Acompañar el fluir del río Arnoia a su paso por Allariz no solo es adentrarse en un agradable bosque de ribera, es pasear por el río que ha permitido a esta preciosa localidad ourensana, el desarrollo económico especialmente en la primera parte del siglo XX, cuando la agricultura pasó por su peor momento en la reserva de la biosfera.
Hoy, como antaño, el río es protagonista en cualquier visita a Allariz y nos muestra, además de su flora y fauna, un legado cultural y etnográfico de enorme interés asociado al agua.
Río Arnoia a su paso por Allariz.
La Reserva de la Biosfera del Área de Allariz ocupa una depresión morfotectónica a unos 600 metros de altitud, en una zona de confluencia de ambientes continentales y atlánticos y enmarcada por rebordes montañosos entre los que destaca al norte el macizo granítico de Allariz, por el que discurre encajonado nuestro protagonista: el río Arnoia.
El río Arnoia es uno de los tres ríos que recorren la reserva de la biosfera Área de Allariz. El más importante es el río Limia, sello de identidad de la mitad sur de este espacio natural. En la zona norte, el río Ourille en A Bola y el Arnoia en Allariz, ponen la nota fluvial en la zona norte de la Reserva.
Puente románico de Vilanova, en Allariz.
El río Arnoia es un afluente del Miño. No es un río gallego más. Es el más largo de la provincia de Ourense (84,5 km). Nace en la Sierra de San Mamede a unos 1.300 metros de altitud (Rebordechao, municipio Villar de Barrio) y cuando llega a Allariz presenta ya un caudal y anchura notables. Un poco más abajo se estrecha para abrirse paso por el granito en el pequeño cañón de Rubillós y más adelante recibe las aguas del río Ourille para fundirse camino del Miño.
A su paso por Allariz el río discurre calmado; serenidad que de vez en cuando interrumpe con algún salto de agua que es la razón de ser de los molinos asentados en su orilla. No solo molinos, también curtidurías, puentes históricos, etc.; el legado cultural e industrial en ambas orillas es tal que se creó el Parque Etnográfico do Arnoia, que engloba la Fábrica de curtidos de la familia Nogueiras (museo del Cuero), el Muiño do Buraco (molino hidráulico harinero recuperado y en funcionamiento desde 1992) o el Museo do Tecido (museo del Tejido “O Fiadeiro” donde se muestra el cultivo y transformación del lino). Destaca también el Área fluvial de O Arnado, el parque do Portovello, el Paseo da Alameda y puentes como el románico de Vilanova o el puente de A Acearrica y su playa fluvial.
Fábrica de Curtidos de la familia Nogueiras (Museo del Cuero).
Entre bosques y jardines
Paseos creados a ambos márgenes del río permiten realizar un recorrido circular para conocer el río, su flora, su fauna y su etnografía. Y todo sin perder de vista el imponente perfil del pueblo de Allariz, declarado conjunto histórico-artístico en 1971, que, coronado por su castillo, se amolda a la ladera granítica en su bajada hacia el río. No existe un trazado o un sentido de la marcha estipulado como tal; eso queda al gusto del consumidor en función de sus preferencias. Las aves están habituadas a la presencia de alaricanas, alaricanos, visitantes y turistas, aunque cuando de coger los prismáticos con más calma se refiere, las primeras horas y últimas del día son las más recomendadas.
Un apacible paseo permite recorrer ambas orillas del río en Allariz.
Existe también una senda de unos 5 kilómetros que acompaña al río en el Corredor temático del Arnoia desde el Ecoespazo O Rexo hasta el Festival de Jardines, en Allariz.
El Ecoespazo O Rexo es un interesante enclave ecoturístico que engloba etnografía, el arte de Agustín Ibarrola plasmado en las piedras entre las que pasta las ovejas de la granja y quesería artesanal en la que se elabora el “queso O Reixo”. Todo con un marcado sello de interpretación ambiental desde el Centro de Educación Ambiental O Rexo. Y allí en este ecoespacio, también es protagonista, como no podía ser de otra manera, el río Arnoia. Con un aspecto más silvestre que en Allariz, el bosque de galería en el que crecen alisos, sauces, álamos, etc. se muestra realmente bello. En Allariz el río abraza el ocio y el relax a partes iguales, con una interesante fauna de anfibios, peces y aves fundamentalmente.
Obra de Agustín Ibarrola en el Ecoespazo O Rexo.
Los Jardines son lo más visitado de Allariz. Se extienden ocupando buena parte de la margen derecha del río a su paso por la localidad y en ellos se desarrolla el Festival Internacional de los Jardines. Un toque versallesco con aire nipón a orillas de un río tan gallego como el Arnoia.
El Festival Internacional es un espacio verde de 3 hectáreas inaugurado en 2010 y que comprende una parte fija y otra abierta a los diseños presentados a concurso. La parte que renueva cada primavera está formada por doce espacios alimentados por la creatividad de diseñadores de todas las partes del mundo.
