Gran ruta por la naturaleza vasca

En la variedad está el gusto. Y gracias a su biodiversidad, en la naturaleza vasca hay para todos los gustos. Un total de nueve parques naturales, una reserva de la biosfera y un geoparque, entre otros espacios naturales protegidos, componen un recorrido de ensueño por el norte peninsular. Y todo sin salir del País Vasco.

La carta de la biodiversidad vasca está compuesta por los siguientes platos: los parques naturales de Valderejo e Izki (Álava), Gorbeia y Urkiola (Álava-Bizkaia), Armañón (Bizkaia), Aizkorri-Aratz (Álava-Gipuzkoa), y Aralar, Pagoeta y Aiako Harria (Gipuzkoa); y también el Geoparque Costa Vasca (Gipuzkoa), la Reserva de la Biosfera de Urdaibai (Bizkaia) y el Anillo Verde de Vitoria-Gasteiz (Álava) con los Humedales de Salburua a la cabeza.

Con tanta materia prima de calidad vamos a buscar los ingredientes que permiten elaborar un menú único identificando qué aporta de diferente y diferenciador un espacio natural a otro, para confeccionar así un gran recorrido que los enlace disfrutando de lo mejor de cada uno. ¿El resultado? la Gran Ruta por la naturaleza del País Vasco. Un recorrido de touring con la naturaleza como hilo conductor y con el vehículo como mero medio de transporte para, una vez alcanzado el destino, fusionarse con la naturaleza a pie, a través de las múltiples opciones de sendas y actividades ecoturísticas locales.

Vamos a dotar al recorrido de un sentido lógico de marcha, optimizando así los desplazamientos y minimizando así nuestra huella de carbono, que de eso también se trata. Nosotros ya lo hemos hecho mientras elaborábamos la serie de reportajes del Especial dedicado a los parques naturales vascos. Hemos calculado, compensado y certificado la huella de carbono por la elaboración de estos reportajes -entre los que se incluye el que ahora estás leyendo- y con el documento oficial de Naciones Unidas que lo acredita.

En ruta

Volviendo al recorrido, empezando por el sur y siguiendo el orden en el sentido de las agujas del reloj, ahí va nuestra propuesta de itinerario circular que comienza y acaba en Vitoria-Gasteiz visitando Izki, Salburua, Valderejo, Armañón, Urdaibai, Costa Vasca, Pagoeta, Aiako Harria, Aralar, Aizkorri-Aratz, Urkiola y Gorbeia ¿Qué no te puedes perder en cada espacio natural? También te lo contamos:

Parque natural Izki

El pulmón de la Montaña Alavesa es un enorme robledal, el mayor del País Vasco, en el que viven seis de las ocho especies de pájaros carpinteros de la península Ibérica. El escaso pico mediano, su abanderado, alberga aquí el 30% de la población ibérica (350 parejas). Esta ruta te permite ir en su búsqueda y la del resto de pícidos en este gran bosque de roble melojo.

¿Qué ver en Izki?

Desfiladero del Izki, en Korres (WP.1): Muy cerca de Korres, donde se ubica el centro de visitantes del parque natural, el río Izki dibuja un bello zigzag dando forma a su corta pero bella garganta.

Hides de Urturi (WP.2): al sur del mayor melojar del continente europeo, en Urturi, se ubican los hides de Augur Nature. Estos escondites fotográficos te permitirán un contacto muy cercano, íntimo, con el pico mediano y otros pájaros carpinteros, además de una larga lista de pequeñas aves.

Humedal de Salburua

Salburua es el parque periurbano más sobresaliente de cuantos forman el Anillo Verde de Vitoria-Gasteiz. Se trata de un humedal con enorme biodiversidad, accesible, paraíso ornitológico englobado en la Red Natura 2000, en el que viven joyitas naturales como el visón europeo, la rana ágil o las formaciones de espadilla. El principal humedal vasco es parada obligada en este recorrido y aporta la biodiversidad de un ecosistema único en la ruta. Visitaremos otros humedales, pero no de interior. No te vayas de este acuífero sin disfrutar de:

Ataria (WP.3). Este magnífico edificio, desde el que realizan una sobresaliente labor de educación ambiental, es visita obligada. El entorno ofrece también algunos de los rincones más bellos del humedal.

Balsa de Arcaute (WP.4). Es el lugar preferido para la manada de ciervos que habita Salburua. Estos mamíferos caminando por el humedal se han convertido en una de sus postales naturales más icónicas y para ello te recomendamos acercarte hasta el observatorio de Los Fresnos.

Parque natural Valderejo

Este valle encajonado, dominado por el río Purón, ofrece los singulares paisajes del anticlinal de Valderejo. Lo imprescindible en el más pequeño de los parques naturales vascos, es acercarse hasta el desfiladero del Purón y disfrutar del vuelo de los buitres leonados. En ambos casos, la Casa del Parque de Valderejo (WP.5) es el punto de referencia. En la primera propuesta por ser el punto desde el que parte el sendero de 11 km. ida y vuelta que conduce hasta la cascada de El Chorro, en el punto donde el río abandona Euskadi para continuar su discurrir por el burgalés valle de Tobalina.

Parque natural Armañón

Más al norte, en el límite con Cantabria, emergen poderosas las moles calcáreas del parque natural Armañón. Con valores naturales relevantes en el exterior, el principal atractivo de Armañón se encuentra bajo tierra, en las más de 200 cuevas y simas. Una de ellas destaca por encima del resto: la Cueva de Pozalagua (WP.6). Perfectamente acondicionada para las visitas turísticas (guiadas), esta bella cavidad alberga salas con un sinfín de estalactitas y estalagmitas, pero lo que la hace única a nivel mundial son sus estalactitas excéntricas. No hay otra cueva en el planeta Tierra con la densidad y el tamaño de las excéntricas de Pozalagua.

Reserva de la Biosfera de Urdaibai

Esta Gran Ruta llega al mar. Aves, geología y baños de bosque son solo algunas de las cosas que aguardan al visitante en la Reserva de la Biosfera de Urdaibai, en la ría de Mundaka, un espacio natural que pasó a formar parte de la red mundial de Reservas de la Biosfera en 1984. Adentrarse en su estuario, en el ambiente fluvial, en su geología kárstica y arrecifal, o en bosques como el de Oma, el robledal de Arratzu o el encinar cantábrico, es un viaje a la Naturaleza con mayúsculas.

Ekoetxea (WP.8). Y si hablamos de educación ambiental, te animamos sin duda a una pausada visita a Ekoetxea Urdaibai. Magnífico centro y excepcionales instalaciones dedicadas a la naturaleza en todas sus vertientes las existentes en este edifico monumental que es la Torre Madariaga, una casa torre del siglo XV.

Mirador de la ermita de Santa Catalina (WP.9): Excepcional panorámica al borde del mar la que se disfruta desde el emplazamiento de esta ermita de Mundaka. Te animo desde aquí a descubrir la fascinante y desconocida geología de Mundaka (la empresa local Ekobideak te la mostrará de maravilla): desde formaciones como los pináculos kársticos hasta infinidad de fósiles marinos y ¡un arrecife! La piedra de Ereño o “mármol rojo”, embajadora pétrea de Urdaibai, es en realizad una piedra caliza arrecifal formada en el cretácico inferior, hace 145 millones de años.

Geoparque Costa Vasca

El ecuador de la gran ruta por la mejor naturaleza de Euskadi lo marca un paisaje único: el del Flysch de la Costa Vasca. Es único, pero no el único. No debes perderte el sorprendente paisaje kárstico de esta porción de litoral.

En el extremo oeste del espacio natural, en Mutriku, se encuentra la Playa de Saturrarán (WP.10). Su mirador está dedicado a comprender los grandes cañones submarinos en el nacimiento del Golfo de Bizkaia. Los conglomerados de cantos que tienes frente a tus ojos proceden del macizo francés de Las Landas, de ahí que esta playa presenta conexión submarina con territorio francés a través de un gran cañón. Fuera del cañón la sedimentación es mucho más lenta y sus arcillas negras, que se alternan con areniscas (turbiditas), forman el conocido como Flysch negro.

Los grandes tesoros se muestran y disfrutan con prudencia y deseo. En pequeñas dosis. Es lo que ocurre con el Flysch, que solo se deja ver con todo su poderío en las horas de bajamar. Para disfrutarlo existen diferentes miradores repartidos por el litoral, pero desde El Ecoturista nos “mojamos” y te recomendamos dos de ellos: el mirador de Sakoneta (WP.11) y el mirador de Algorri (WP.12). Este último muestra la línea que marca el periodo de la extinción de los dinosaurios hace 66 millones de años.

El Valle Escondido de Olatz (WP.13) es en realidad una gran olla cerrada, una depresión kárstica en la que descubrir desde los poljés y dolinas -ambos camuflados entre praderas siempre verdes-, lapiaces desnudos y otros a los que se aferran pequeñas masas de encinar cantábrico y montes con forma de pirámide que son en realidad pináculos calizos. Entre los pináculos destaca por su estética el que se observa desde el mirador de Sasiola (WP.14), en el valle de Lestur, sobre un meandro del río Deba. Un meandro de manual, por cierto.

Este espacio natural cuenta con su propia ruta de ecotouring por los miradores del Geoparque Costa Vasca, un itinerario que combina el vehículo y los pequeños paseos hasta los privilegiados balcones naturales. Un recorrido presidido por la corriente slow, la gastronomía a base de productos locales de excepción o la sostenibilidad nivel faraónico. A lo primero invitan lugares como la localidad pesquera de Mutriku, los valles escondidos de Olatz o Lastur, el valle de la Prehistoria o cualquiera de los enclaves salpicados por los municipios de Deba, Mutriku y Zumaia, los tres municipios que conforman el geoparque. De lo segundo hay también donde elegir, desde los productos del mar kilómetro 0, a las queserías o el vino Txacoli. Y como máximo exponente de sostenibilidad destaca sin duda la Mutrikuko olatu Planta. Referencia mundial.

Parque natural Pagoeta

La siguiente parada del recorrido nos lleva junto a uno de los bosques de tejo más importantes de la península Ibérica. Importante por la densidad de estos árboles de hoja perenne y propiedades mágicas, místicas, para muchas culturas. Un sendero circular de 7 km. que parte de la localidad de Aia (WP.15), se adentra en la ladera de Laurgain, donde crecen estos ejemplares. Se trata de árboles jóvenes entre los que destaca el tejo de Behorbarrote, de unos 200 años de edad y declarado Árbol Singular en Gipuzkoa. Además del bosque de tejos, Pagoeta aporta al recorrido un hayedo diferente por la altura de sus árboles al resto de los muchos otros que verás a partir de ahora a lo largo de la ruta.

Parque natural Aiako Harria

El parque natural Aiako Harria o Peñas de Aia es un privilegiado balcón pirenaico con vistas hacia la gran cordillera Pirenaica y hacia la cercana costa. Sus privilegiadas panorámicas permiten la despedida visual con el mar y recuperan de nuevo el contacto con la montaña, que no abandonaremos hasta el final del recorrido. Las Peñas de Haría, a pesar de apenas superar ligeramente los 800 metros de altitud, tienen un aspecto imponente. Se debe a la naturaleza granítica, diferente al resto de las montañas que encontraremos y con el aliciente de ser la formación geológica más antigua de Euskadi.

Una parada recomendable es el crómlech de Oyanleku (WP.16). El lugar aporta el contacto con la cultura megalítica y una buena visión de las Peñas de Aia (Aiako Harria). En la senda de acceso al yacimiento, se atraviesa un bello hayedo trasmocho.

Parque natural Aralar

Entramos en tierra de gigantes. La ruta se mueve ahora por las alturas de la sierra de Aralar, morada de seres mitológicos, terrenos donde los frondosos bosques se alternan con excepcionales campas que hacen las delicias de caballos, vacas y especialmente de la importante cabaña ovina de la raza autóctona latxa que produce esa delicia llamada queso Idiazabal.

Oyanleku es un crómlech magnífico que sirve de antesala a la mayor concentración de yacimientos megalíticos del País Vasco, en la Sierra de Aralar.

Dos enclaves se antojan indispensables en esta sierra de la comarca del Goierri. El primero para disfrutar del ángulo más piramidal del fotogénico y mitológico monte Txindoki (1.346 m.; WP.17). El segundo, un recorrido pedestre que nos adentra en las zonas más altas de la sierra, en las campas ganaderas donde proliferan las ovejas latxas y las citadas estructuras megalíticas (WP.18).

Parque natural Aizkorri-Aratz

Progresivamente el paisaje montañoso va ganando en envergadura y nos deposita a los pies del techo de Euskadi, los 1.551 m. del pico Aitxuri. Es la cima más alta de la muralla caliza de Aizkorri y en sus laderas crecen fantásticos bosques de haya. La ruta que te proponemos para conocer estos hayedos calizos no podía ser más atractiva, la que se abre paso a través del túnel de San Adrián para alcanzar las zonas altas dominadas por el haya y la roca. El túnel de San Adrián (WP.19) es un túnel natural horadado en la roca que separa precisamente las dos cumbres que dan nombre a este espacio protegido: Aizkorri (1.528 m.) y Aratz (1.443 m.). Este paso histórico es la cerradura de las cumbres, la puerta de entrada al esplendor y riqueza de los hayedos calizos del techo de Euskadi. A los que llegamos a través de la alfombra roja que supone la calzada del Camino Real de Postas (Camino de Santiago).

Parque natural Urkiola

Si imponente es la visión de la cara norte del Aizkorri, no menos agreste es el emblemático destino montañero del parque natural Urkiola, ubicado en el centro geográfico del mapa ecoturístico del territorio vasco. La disposición de las montañas calcáreas de Urkiola, presididas por la cima del Anboto, sirven de barrera natural entre la vertiente atlántica y la mediterránea y crean las condiciones ambientales características de una y otra vertiente. Como resultado, la mezcla de ambas vegetaciones con alrededor de 700 especies. Los bosques de haya, robles, melojos, abedules y encinas son las principales formaciones forestales. También las repoblaciones, pastizales y las comunidades de roquedo.

Urkiola es el gran ecotono vasco y para conocerlo, una parada indispensable es el mirador de las Tres Cruces, junto al santuario de Urkiola (WP.20). El mirador ofrece la mejor toma de contacto con las principales montañas de Urkiola, aunque la cima del Anboto queda oculta a la vista desde esta posición. Para verla lo mejor es acercarse a las inmediaciones de Olaeta (WP.21). Este enclave meridional sirve también para conocer la vegetación mediterránea de Urkiola a la par que en la vecina sierra de Arangio crecen los bosques de haya.

Parque natural Gorbeia

Hayedo de Otzarreta (WP.22). El pequeño hayedo trasmocho de Otzarreta es uno de los más fotografiados de nuestro país. Y lo es por su facilidad de acceso, pero sobre todo por la plasticidad y belleza máxima que encierra en cada uno de sus recovecos. Atravesado por el arroyo Zubizabala, en ningún otro lugar de la piel de toro un bosque de tan reducidas dimensiones atrapa a ningún visitante con la fuerza que lo hace Otzarreta. Atraído por la hechizante magia de este icónico hayedo vasco, descubrirás el humedal de Saldropo y su antigua turbera.

Cascada de Gujuli (WP.23). En la vertiente meridional de la Sierra de Gorbeia se descuelga la espectacular cascada de Gujuli. Y lo hace a plomo desde una altura de casi 100 metros. Acércate hasta este rincón en época de lluvias y sabrás lo que es un buen salto de agua. El gran broche final a este apasionante recorrido por la biodiversidad vasca expresada en sus parques naturales.

Lista de paradas WP (Way Points) en la Gran Ruta por la Naturaleza Vasca:

WP.1: Lat. 42,6966419º Long. -2,4359457º

WP.2: Lat. 42,6616839º Long. -2,51046º

WP.3: Lat. 42,8614573º Long. -2,6434577º

WP.4: Lat. 42,8534586º Long. -2,632711º

WP.5: Lat. 42,8761428º Long. -3,229183º

WP.6: Lat. 43,2603286º Long. -3,3856401º

WP.7: Lat. 43,3468857º Long. -2,6571721º

WP.8: Lat. 43,3751205º Long. -2,6976974º

WP.9: Lat. 43,4098122º Long. -2,6943672º

WP.10: Lat. 43,3216532º Long. -2,4109916º

WP.11: Lat. 43,2882752º Long. -2,3060455º

WP.12: Lat. 43,2995897º Long. -2,2673453º

WP.13: Lat. 43,2886074º Long. -2,4078741º

WP.14: Lat. 43,2805213º Long. -2,3644388º

WP.15: Lat. 43,2373245º Long. -2,1475065º

WP.16: Lat. 43,2541036º Long. -1,826655º

WP.17: Lat. 43,0347487º Long. -2,169096º

WP.18: Lat. 42,9921206º Long. -2,1391688º

WP.19: Lat. 42,9351275º Long. -2,303236º

WP.20: Lat. 43,1041784º Long. -2,6442009º

WP.21: Lat. 43,0462109º Long. -2,6321197º